Lebron James se corona campeón de la NBA

Criticado hasta la saciedad en el pasado por su juego individualista, pero considerado un rey sin corona luego de dos fracasos en las finales de la NBA, el alero LeBron James vio al fin realizado su sueño de ganar un anillo de campeón guiando al Miami Heat al título de la temporada 2011-2012.

James tuvo otra gran actuación con el Heat para llevarlo a una aplastante victoria de 121-106 el jueves, en el quinto partido de la final contra Oklahoma City Thunder, y al triunfo en la serie final por margen de cuatro victorias a una.

Su gran trabajo en esta serie le valió su primer título de Jugador Más Valioso de la final (MVP en inglés), galardón que había ganado merecidamente las pasadas tres temporadas regulares.

"He soñado con esta oportunidad y este momento durante mucho tiempo, incluso ayer por la noche, incluso hoy. Mi sueño se ha convertido en una realidad ahora, y es la mejor sensación que he tenido en mi vida", expresó James en la rueda de prensa posterior al partido.

Con su extraordinario desempeño en el último tope, al cerrar con un trile-doble de 26 puntos, 11 rebotes y 13 asistencias, James fue el eje del segundo título de Liga del Miami Heat.

El jugador de 27 años promedió en cinco partidos de esta final 28,6 puntos, 10,2 rebotes y 7,4 asistencias por encuentro.

"El pasado año me criticaron mucho y decían que era individualista en mi juego. Dejé que eso me afectara y me pasé todo el tiempo tratando de probarle a la gente que no era así", añadió.

"Eso me afectó mucho porque yo sé que esto es un juego de equipo. Los entrenadores que tuve cuando era más joven siempre predicaban acerca de que no hay "Yo" en el equipo, y para ganar un campeonato, no importa en qué nivel, usted tiene que jugar como equipo", apuntó James.

"Todo el año pasado traté de demostrar a la gente que estaban equivocados pero al final de todo era básicamente una lucha contra mí mismo", subrayó.

LeBron ya había jugado y perdido dos finales de la NBA, una con Cleveland Cavaliers en 2007, en la que cosechó 22 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias por encuentro, y otra con Miami en 2011 (18 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias de media) .

"Maldita sea, ya era hora", dijo James con una gran sonrisa. "Nunca he sido más feliz en mi vida".